Que más da que se acabe
Otro día. Que en un mes
Expire una década
O el año.
La espiral del tiempo es la que hace daño
Por poner en relieve
Todos los engaños humanos.
Antes de que termine una guerra
Han empezado otras veinte y dos.
(Los telediarios se llenan la boca
Con la mierda de la palomita de la paz
Y la unidad de todas las naciones
En busca del bienestar)
Por cada cabrón que se libra de la cárcel
Tras haber enterrado, mínimo, a una inocente
("víctima del amor")
Preparan otras cien fosas del año.
Mil tumbas, diez años.
Antes de que superes la depresión
Ya has gestado otras ocho.
Porque te quitas de encima una culpa
Y te contagian otro par de pares de esos ases
Y tú, solo y sola, sin darte cuenta
Los elevas a la estratosfera (o al cubo)
Cuando te pones como una cuba.
Pero ¡Eh!
No pasa nada
Atragantémonos el 31 con doce píldoras blancas
No hay nada mejor bajo prescripción médica
Que empezar otro frívolo año
Al lado de la pantalla plana del televisor
Babeando felicitaciones, con el lóbulo extirpado,
Cuando el presentador marca el
"Feliz año nuevo"
Como si todo, mágicamente y por sí solo,
Vaya ir a mejor.
Así que por eso mismo,
¿Qué más da que se acabe el milenio
Y con él, el puto mundo arda hasta sus cimientos?
¿Qué te pasa?
¿Estas palabras te infunden miedo?
Solo los locos se dan cuenta que en el cuento
Los que mandan, son títeres
Solo les preocupados por el dinero
Y nada de eso del bienestar ajeno
Les quita el sueño.
Los príncipes matan y violan y viceversa.
Las princesas renuncian a su corona
Porque prefieren exiliarse de por vida
Que aguantar un sapo que,
Una vez acabado el capítulo de color de rosa,
las asesina.
Pronto no quedarán finales felices
Ni la gente podrá comer perdices
Solo quedará plástico para mascar y las conciencias
Ahora alienadas en la cordura del capital por fin se darán cuenta
(Una vez que el apocalipsis no se pueda parar)
Que los billetes, poco nutriente les puede dar.
Joder... La Muerte está hasta sus huesudas partes genitales
De que antes de morir
Haya tantas almas en pena.
Despierta.
No existe el cielo y aquí, en este planeta,
Orquestamos los humanos nuestro propio infierno.
Maganto.
