Al son de la madrugada,
Del humo, cenizas
Y tormentas eléctricas
Que rezuman voces de un mañana
Que será,
Como ayer, otro más,
Me insta la necesidad
De explotar cada neurona,
Planeta y estrella.
Espectador desde dentro:
Cuantos no-niños habrán muerto,
Los fracasos y sus intentos,
El tono de los lamentos
Y el invierno mordiendo.
Desvaríos de un sinsentido
Que sale desde dentro
Frustrando cualquier momento.
No hay bandera blanca,
No hay tregua,
No hay paz.
Maganto.